Un día, platicando en una fiesta, descubrimos una delicada pero innegable relación estética entre Dylan McKay, de Beverly Hills 902010, y Kurt Cobain, de Nirvana. Nos pareció un tema muy importante, y decidimos seguirle la pista y compartir los resultados. Inmediatamente nos dimos cuenta de que ese hallazgo era apenas la punta del ice(pop)berg. El pop necesita ser investigado, nos dijimos, y así surgió ENSAYOSUAVE; un blog en el que analizaremos temas fundamentales de la cultura pop. ENSAYOSUAVE es un POPTART crítico que nos hará descubrir redes ocultas dentro de un universo en alto contraste. Una LOLLYPOP que satisfará nuestras reventadas papilas, un POP-EYE impactado frente a la pantalla de una lap-t(p)op, veinte veloces dedos bailando POPPING sobre un teclado luminoso.

ENSAYOSUAVE es un nuevo tipo de ensayo.

Un ensayo suave, fresco, cool, indiferente, pero vital.

ENSAYOSUAVE ES EL POP.

Monday 5 December 2011

Y QUÉ SI JAPÓN TENÍA RAZÓN...

 (o, de cuando pop y emo se confunden)




No todo en el pop es felicidad, Roy Lichtenstein punteando grandes lienzos, Lou Reed saludando desde un jet, Beyoncé bailando al ritmo de Anne Teresa de Keersmaeker... también hay momentos trágicos (ni que hablar de Basquiat, de Mapplethorpe...) momentos melancólicos (idem), o momentos simplemente inciertos. En esta ocasión, les presentamos dos ensayos que, aunque difieren en tema y tono, tienen más de un punto en común. Dos ensayos que escribimos por separado, y que decidimos publicar aquí al notar que convivían de una manera oscura pero innegable. A veces, nuestras vidas, tan pop, tan indie, tan occupy pero tan starbucks, también son un poco emo. Y qué si Japón tenía razón? 






DEL FRACASO
POR ANABELLA PAREJA



Finalmente he decidido utilizar un par de páginas de este libro para exponer abiertamente la situación en la que me encuentro. Una sensación de fracaso en mi carrera como bailarina y coreógrafa que me invade día a día, y por mas frases optimistas de Henry Ford que me haya encontrado, en las que el fracaso suena como una gran oportunidad, yo realmente he dejado de sentir este optimismo y he pensado seriamente en retirarme y poner una pizzería en la Colonia Roma.
He aquí….
10 MANERAS DE SENTIRSE UN FRACASADO
1. Llevar 5 años trabajando de manera independiente, y darte cuenta que todos tus amigos/colegas han recibido por lo menos una beca o un apoyo y que por mas que lo has intentado, a ti no te ha tocado ninguna. Y cuando le has pedido una carpeta alguno para entender que es lo que estás haciendo mal con tu aplicación, descubres que no hay diferencia con las tuyas y encima las han presentado con mala ortografía.
 2. Ver a tu madre al siguiente día de tu estreno y cuando le preguntas qué le pareció la obra, responda: “Ahh! gracias por recordarme, sabes que te compré una crema porque te ví bastantes arrugas en el escenario.”
3. Que un colega que está trabajando contigo en una obra tuya, antes de salir a escena te diga: “Ayy cómo me gustaría hacer cosas tan ligeras (entiéndase banales por el tono), como las que tu haces”, después de que llevas un año trabajando en la obra, cuidando la estructura de la misma detalle a detalle.
4. Tener un karma con la segunda función. Siempre sentir en la primera función que la obra va por buen camino e inevitablemente en la segunda función sentir lo opuesto. Y lamentablemente casi siempre te dan dos funciones nada más, así que nunca puedes apreciar si la obra realmente funciona o no.
5. Cuando terminas de dar función y te acercas a saludar a alguien de confianza, sin preguntar nada, solo escuchas la frase: “Bien, o sea tengo un par de cositas que comentarte, pero creo que ahí va.”
6. Que tengas muchos amigos que trabajan en revistas culturales y ninguno nunca te haya hecho una entrevista o mínimamente te haya preguntado si te puede ayudar con la publicidad de tus funciones.
7. Tomar un taller y que justo el profesor diga que si a los 30 años no has hecho gran cosa, es probable que sea demasiado tarde y darte cuenta que tienes 32 años y que no entiendes muy bien a qué se refiere con hacer gran cosa.
8. Que por intentar trabajar desde el humor, que tanto disfrutas, quedes visto como alguien que no se toma el trabajo en serio.
9. Que por primera vez haya una crítica de danza que va a ver tu obra y alguien te comenta que le gustó, por lo que durante dos semanas buscas ilusionado en los diarios, revistas y en internet si aparece alguna nota que puedas sumar a tus aplicaciones, hasta que te das por vencido.
10. Darte cuenta que a pesar de todas las veces que te sentiste un fracasado, vas a seguir intentándolo y seguirás exponiéndote al fracaso.




DEL SUICIDIO CONSIDERADO COMO AUTORRETRATO 
POR JUANFRAN MALDONADO



Hay un bellísimo cuento de Thomas De Quincey llamado “del autorretrato considerado como una de las bellas artes”. Si habláramos en términos de lo que pasa hoy en el Arte, quizá no nos preocuparía tanto el calificativo “bellas” sobre ello (siendo “ello” el asesinato artístico), sin el cual, parte del sabor irónico de la frase se perdería. Y aún así, el asesinato podría ser considerado como una posible plataforma sobre la cual puede producirse arte, si pensamos con (creo que es) Deleuze, que el objetivo del arte es producir experiencias nuevas (o por lo menos distintas).
Problemas legales aparte, tenemos un ligero obstáculo para hacer ese tipo de arte, y es la imposición. Una forma de arte que basa sus modos de producción en la imposición, o que la produce de cualquier manera, apoya implícitamente una política totalitaria. En los tiempos que corren, en esta sociedad contemporánea, eso no puede ser aceptado. Ahí yace una aparente contradicción, y entonces, reformulo:
El objetivo del arte es producir la posibilidad de que nuevas experiencias surjan, pero la experiencia misma solo puede ser producida por la relación entre esta posibilidad y una participación activa del espectador. Todas las formas de asesinato, incluso, por decir, el asesinato “consensual”, son, en el núcleo mismo de su acción, una imposición.
Pero el suicidio, en cambio… El suicidio es al autorretrato lo que el asesinato no pudo ser a una forma de arte. Una pregunta queda: ¿auto imposición? El lector decidirá; quizá la “auto-imposición” no sea inherentemente política, puesto que (obviamente) no incluye (intrínsecamente) a otros.
Si pensamos en nuestra identidad como algo múltiple, cambiante, no-unívoco, producto de procesos de subjetivización externos y siempre parciales en vez de pensar sobre ella como un sujeto por si misma, el concepto clásico de autorretrato es una tarea imposible, excepto dentro del marco de una máscara prefabricada construida en la representación. Ahí, el retrato sería la máscara de la máscara.
Quizá la muerte es nuestra única “certeza ontológica”; y entonces, el único momento en el que podríamos pensar en la identidad como tal. Ser concientes de la producción de esta, y más allá, producirla de hecho nosotros mismos, le podría dar a nuestro “momento de ser” (es decir, la muerte) no solo el destello de lo que cualquier muerte es por si misma, sino la presencia desdoblada del ser, siendo presentado independientemente de la representación. Un autorretrato en carne propia, en las palabras de Bowie. Si aceptamos estas ideas, la única posibilidad que tenemos de practicar el autorretrato es, inevitablemente, el suicidio.


Monday 8 August 2011

AMÉRIKA A CONTRA LUZ (DOS FICCIONES POP)

 Ésta vez, ensayo suave se convierte en ficción suave. Dos cuentos cortos, relatos pop, ficciones suaves. Qué hace que un cuento sea pop? las referencias? la estructura? el tono? Anabella Pareja y Juanfran Maldonado investigan las posibilidades del pop a lo largo de unos cuantos caracteres. 






A CONTRA LUZ
POR JUANFRAN MALDONADO

Ahí estaba. Descansando sobre el colchón. Su espalda desnuda hacia mi, larga, esbelta y aceitunada. Con unos calzones azules de algodón ajustados. Translúcidos quizá, más que transparentes. La difusa luz que filtraban las cortinas, aunque a contraluz, era lo suficientemente difusa como para permitirme ver claramente. “She’s Like A Rainbow”. Lo pensé y luego lo dije.
 “¿Qué?”
 “¿Qué?” respondí. Nos reímos. “She’s Like A Rainbow. Me hiciste acordarme”

Me gustaba la violencia, así que escogí los más ajustados. No porque violentaran mi cuerpo, sino porque ofrecían una imagen más agresiva de mis piernas. “Sexy Beast”—recordé la película con Ben Kingsley, y luego pensé en lo difícil que sería quitármelos rápido cuando la situación lo ameritara. “Igual lo he logrado antes” y salí del lugar. Después supe que las botas vaqueras azul turquesa les habrían ido mejor que los zapatos, y que si las hubiera usado las cosas habrían sido distintas. No sé por qué. Alguna conexión místico – cromática.

“Promise me you will never leave” me dijo. “I promise I will leave every time. Tú también”, respondí. Me besó y me dio una bofetada aún antes de haber terminado el beso, lo que fue muy confuso. “Cómo puede no perder el ritmo”, pensé. “Nunca entenderé la onda multitask”.

Se levantó de la cama. Abrí los ojos apenas, todavía medio dormido y alcancé a ver su espalda, amplia, fuerte y aceitunada. Aún con una marca de los dobleces de las sábanas justo arriba de la nalga derecha. Estiré el brazo y bebí lo primero que encontré. Por suerte era agua. En medio de la contraluz difusa por las cortinas y la leve y larga caída de líquido que escuchaba venir desde el baño, escuché también su voz, aún ronca, insistiendo que explicara el origen de mi cicatriz en el brazo. Inventé un accidente cualquiera y me voltee. Me sentí misterioso. Rió.
“¿Por qué escuchamos a Norah Johnes?”
“No sé. Es el mood ¿no?, ¿Café?”
 “Café”
Skinny Jeans.

Esperando el bus, una chica y un chico pasaron enfrente de mi. Ambos eran guapos, y ambos hacían lipsinc de alguna canción (me pregunté cual sería en cada caso), mientras un cable blanco trazaba líneas oblicuas desde sus oídos hasta el enorme bolso de ella y el pantalón de él. Ella era más alta aunque usaba flats, y ambos eran mas altos que yo, supuse. Los observé unos segundos. no iban juntos, pero estaban muy cerca. Llegó mi bus.

Nunca pensé que viniera. Nos habíamos visto tan pocas veces el último año… Era algo casi dado por perdido. Nos citamos de la manera más normal. Y lo asumimos normal. Yo lo asumo normal. Practico besos en el espejo al estilo James Franco.
“Cuánto gastaste en esto?” preguntó
“It’s not about the money”
“Do you love me?”
“It’s not about the love”
Mis ojos se derritieron un poco. Rió y yo lancé mi vaso de whiskey a la chimenea. Hubo una pequeña explosión ahí dentro. Era un gesto que siempre había querido hacer, pero ahora lo disfrutaba tan poco…  No me importaba.
Empezó a llorar y salió del cuarto. No azotó la puerta. Yo me acosté en el piso, boca arriba, como quien en LSD se acuesta en el pasto a mirar las estrellas. Era un techo inesperadamente bajo y en el centro colgaba un candelabro de baccarat. Se podría decir que no era ostentoso para ser de baccarat. “suerte” pensé (siempre me han parecido de pésimo gusto). Quise romperlo, lanzarlo contra la chimenea igual que había lanzado el vaso de whiskey. No por enojo o frustración, sino porque me atraía la idea. Me imaginé el sonido y me divirtió, pero seguí acostado, observando el titilar de las falsas flamas en los muchos reflejos del cristal. Canté This Place Is A Prison de The Postal Service, y aún sin saber bien la letra la repetí varias veces, cambiando de entonación y alterando la melodía levemente, y me quedé dormido.
Next thing I know, we were having sex.

Esperando el bus, una chica y un chico pasaron enfrente de mi. Ambos eran muy guapos, y ambos hacían lipsinc de alguna canción (me pregunté cual sería en cada caso), mientras un cable blanco trazaba líneas oblicuas desde sus oídos hasta su enorme bolso y su pantalón. De los dos, tenía un poco de más altura aunque usaba flats, y ambos eran mas altos que yo, supuse. Los observé unos segundos hasta que sentí su incomodidad ¿o no?. No iban juntos, pero estaban muy cerca. Llegó mi bus. Tiré el cigarro.




 AMÉRIKA
POR ANABELLA PAREJA

Cuando era mas pequeña disfrutaba ir con su papá a mirar los aviones pasar, se tiraban en el pasto y el le contaba que en este mundo había muchas mujeres llamadas Afrodita y que se distinguían porque caminaban por las carreteras con un casco rojo de motocicleta. Ella, no se llama Afrodita, pero nunca le gustó su nombre.
Afrodita, así la llamaremos de ahora en adelante, ahora mas grande, se dedica a viajar por las carreteras con un casco rojo de motocicleta y a entrar a todas las cafeterías que se encuentra en el camino. Lleva consigo un mapa que le dio su mamá antes de salir, una chamarra de piel, toda empolvada, que le regaló su exnovio, (quien la dejó por que un día ella entró con una pistola a su cuarto y lo amenazó con matarlo, el nunca le creyó que la pistola era de plástico y que solo estaba jugando, le dio tanto miedo que prefirió alejarse de ella) y una cámara de fotos con la que va sacando una foto de cada cafetería a la que va. La cámara es una Holga y como es de rollo cada vez que llega a la foto treinta y seis, se adentra a algún pueblo donde pueda revelarlo y comprar otro. ¡Cómo disfruta de esos rollos que te regalan un par de fotos mas!
Todas las noches en algún motel se dedica a ver sus fotos, por ahora lleva noventa y ocho. Tiene una amiga mucama, Alaska, que cuando anda con poco de dinero, la deja entrar gratis a una de las habitaciones del motel donde trabaja, “MOTEL DIABLITO”, un motel muy limpio y con alberca, así que cuando no hay gente, Afrodita se da un chapuzón. Alaska disfruta mucho ver ese momento en el que por fin Afrodita deja su casco y su chamarra de piel y se pone un traje de baño de flores y luce su pelo. En las noches Alaska la visita en su habitación y se acerca a mirar las fotos con ella. Se sientan en le borde de la cama, sobre el sobrecamas color pastel. Una vez Afrodita le regaló una foto de una cafetería con un cartel neón llamada “AFRODITA”  y que queda en la carretera 8, Alaska pensaba que era su foto favorita y no la quería aceptar, pero ella le confesó que la favorita era otra, la de una cafetería llamada “LOS PLATITOS”, en la carretera 15. En la foto salía una motocicleta frente a la entrada de la cafetería, Afrodita se reía porque todos pensaban que era de ella, alguno se acercaba a preguntarle por ella, cuando salió de ahí caminando, todos se sorprendieron.
Después de dos o tres días en el “MOTEL DIABLITO”, Afrodita desaparecía un par de semanas y después volvía. Alaska sabía que mas que por el tema de dinero, ella iba ahí para no estar sola. Una vez que entraba a la habitación no paraba de hablar, ni la comida le importaba mucho. Alaska le llevaba siempre algo de comer y una lata de Coca-Cola, Afrodita nunca se  la tomó, detalle que alegraba a Alaska, quien se la tomaba en algún momento de la noche. Esta vez Alaska se animó a preguntarle cuando volvería a su casa, a lo que Afrodita respondió que cuando tuviera cien fotos, faltaban dos nada mas, Alaska se puso un poco seria, pero Afrodita le prometió que antes de irse pasaría por ahí a despedirse o tal vez podría ir con ella a la última cafetería, le invitaría una dona y un café en agradecimiento, se sacarían una foto juntas. ¡Claro! Se entusiasmaba Afrodita la última foto de mi álbum tiene que ser contigo, y si ella aceptaba le regalaría el casco. Afrodita sabía que si no caminaba por las carreteras, no tenía sentido usarlo; para volver a su casa se adentraría en el bosque, lo que emocionó mucho a Alaska, se imaginaba tendiendo las camas con el casco rojo y su uniforme. Alaska le preguntó por qué quería volver y Afrodita le explicó que hacía tiempo que soñaba todas las noches con su exnovio, el pasaba a buscarla en un taxi de estos newyorkinos, y cómo son los taxis newyorkinos le preguntó Alaska, elegantes respondió Afrodita. Así que quería volver a buscarlo, era obvio que el sueño era una señal, es mas ya tenía planeado el reencuentro, le comentó. Alaska no dudó en preguntarle cómo sería, repetiría la misma escena de la pistola de plástico, pero esta vez con un secador de pelo, para que quedara claro lo del juego, Afrodita había practicado con el secador del motel, no se puede despegar de la pared se lamentaba, pero el cable es largo. Alaska la miraba, está vez no se puede asustar y le propuso actuar la escena para ella. Cuando terminó, Alaska la aplaudió, le dijo que le fascinaba la cámara lenta que hacía, que era una gran actriz y le propuso usar una canción para la escena. Alaska fue a su habitación por una grabadora que tenía y un cassette, después de un rato de buscar, regresó con Afrodita, quien la hizo escuchar la canción y le dijo que en caso de que le gustara le regalaba la cinta. Afrodita aceptó la cinta, la canción le había encantado, cerraba los ojos y se imaginaba todo, era la canción ideal. Esa noche durmieron en la misma habitación, al siguiente día Afrodita se fue temprano, se despidió de Alaska y le dijo que iría a la carretera 18, que había una cafetería ahí y que en la noche regresaría por ella, para que al siguiente día fueran a la última cafetería, Afrodita le preguntó si podía pedir el día libre, los miércoles era su   día libre, no habría ningún problema.
Afrodita regresó como a las nueve de la noche, Alaska la esperaba sentada en el borde de la alberca, era una noche increíble. Subieron rápido a la habitación y Afrodita le mostró el último rollo revelado y la foto noventa y nueve, la cafetería se llamaba “PARIS”, le contaba que era una obsesión ya que siempre había visto cafeterías que se llamaban así y que cada vez que se lo comentaba a alguien esta persona le hacía referencia a alguna que había visto, Alaska se reía y le confesaba que ella no recordaba ninguna cafetería “PARIS”, pero si peluquerías. Afrodita afirmaba lo de las peluquerías pero lo pedía que hiciera memoria, en todos lados hay un café “PARIS”. Después Afrodita sacó el mapa y le mostró a donde irían al siguiente día, en el mapa había una señal de un cuchillo y un tenedor justo en la carretera 9, era la única que no estaba tachada, Afrodita le explicó a Alaska que la había dejado al final ya que quedaba camino a su casa. Esa noche sacó un álbum de fotos forrado con papel araña color rojo, que había comprado en el pueblo donde había revelado el último rollo y se dedicaron a pegar las fotos.
Al siguiente día se levantaron temprano y salieron, era la primera vez que Afrodita veía a Alaska sin su uniforme de mucama, llevaba unos jeans y una camiseta de rayas rojas y azules. Caminaron mucho y hablaron de todo, Afrodita estaba feliz de por primera vez ir acompañada en la carretera. Finalmente llegaron al lugar, entraron, Alaska le preguntó a Afrodita si podía cambiar la dona por una hamburguesa, Afrodita asintió con la cabeza, esperaron un rato en lo que llegaba la hamburguesa, Afrodita prefirió no comer nada, se tomo un jugo de naranja y el popote lo introdujo por el casco. Cuando terminaron se preguntaron quien podría tomarles la foto, justo las meseras cambiaban de turno, la que las había atendido se había ido y se acercó una nueva con la cuenta, Afrodita miró el prendedor dorado que llevaba la nueva mesera, se llamaba Afrodita y no tenía casco. Alaska y Afrodita se miraron sorprendidas, Afrodita 1 le pagó la cuenta a Afrodita 2, mientras se levantaban de la mesa se animó a preguntarle si nos les podía sacar una foto en la puerta de la cafetería, Afrodita 2 aceptó. Salieron las tres del lugar, Afrodita 1 le explicó a Afrodita 2 como funcionaba la cámara, Alaska esperaba en el lugar donde la foto iba a ser tomada, Afrodita 1 volvió con ella, se quitó el casco y se lo puso a Alaska. Afrodita 2 esperó a que las chicas estuvieran colocadas y les tomó la foto, el cartel de la cafetería era azul, la cafetería se llamaba “AMÉRIKA”. Afrodita 1 fue por su cámara y le dio las gracias a Afrodita 2. Afrodita 2 se despidió de Alaska y de Afrodita 1. Alaska y Afrodita 1 se despidieron, Afrodita 1 prometió ir a visitarla y llevarle una copia de la foto, el problema era que era un rollo nuevo y le quedarían por lo menos 35 fotos antes de revelarlo, Alaska mucho no se preocupó, tener ese casco era suficiente para ella. Con su casco rojo caminó por la carretera rumbo al motel, Afrodita 1 caminó por detrás de la cafetería, a cierta distancia las dos miraron hacia atrás se hicieron una señal con la mano y desparecieron.

Monday 18 July 2011

DOCE RECOMENDACIONES POP

IS THIS POP WHAT I AM FEELING?

* Porque por mas que nos hayan hecho creer que cualquiera de nosotros puede ser pop, todos sabemos que esto no es cierto. Así que aquí unas recomendaciones para facilitar el intento, porque al fin y al cabo el pop es una ciencia y merece ser estudiada *

1. Leer los libros de Elige tu propia aventura mientras usas el transporte público. Mas allá de que Gandhi, los tenga clasificados para niños de 10 a 12 años, considero que la “hiperficción explorativa” es para todos. Se publicaron en los 80’s y tomar decisiones en la forma de actuar de los personajes y tener el poder de modificar la historia, definitivamente es muy pop, mas si lo haces fuera de una videoconsola.

2. Tener entre tu ropa camisetas como la de Naranjito, la mascota del mundial de España ’82 y la clásica de I love 80’s. Sabemos que los 80’s son claves en el pop y por mas que no los hayamos vivido como era debido hay que demostrar que existe en nosotros una cierta nostalgia por ellos.

3. Uno pensaría que con tener en tu casa películas como E.T., Tootsie, Volver al futuro y saberse líneas de alguna película de Almodóvar se es suficientemente pop, pero la realidad es que si quieres destacarte en este mundo tienes que por lo menos haber visto un par de veces la película japonesa, JUVENTUD, de Takashi Yamazaki, que es una suerte de versión tecno de E.T. o WATERBOYS de Shinobu Yaguchi, comedia Pink-pop, de esta última, puedes encontrar el trailer en youtube para que te des una idea.

4. En cuanto a decoración, el papel tapiz es básico, principalmente esos que tienen tonos o verdes con café o amarillos con café y figuras entre árboles, círculos y frutas. Tener objetos como tostadora, licuadora, cafetera, todos en un formato gordito y si tienen algún color vivo mejor, obviamente las pantallas planas no suman puntos.

5. Tener tocadiscos en casa y los discos de La Era de Oro del Pop Español. Ir a los conciertos de Alaska y Dinarama o Fangoria. En Facebook está la página de La Era de Oro del Pop Español, le puedes dar a me gusta, para sumar algunos puntos, aunque no estoy muy segura de que Facebook sea una herramienta pop.

6. Grabar con tus amigos los fines de semana videos caseros de Ciencia Ficción, en los que por ejemplo tu cafetera italiana es un robot que te habla y tu eres un elegido para viajar a otro planeta, mientras que para salvar tu actuación se utiliza una voz en off que describe todo lo que tu no estás logrando hacer.

Anabella Pareja Robinson

POP IS IN THE AIR

*Porque para ser pop no basta con pertenecer a un mundo capitalista. Para ser pop hay que explotar al máximo nuestro bello sistema de producción e idolatría. Todos conocemos la estética propuesta por Andy, Roy, Jasper y todos sus amigos, pero más allá de la estética, más allá de esos colores brillantes en alto contraste que nos encantan, de esas cámaras de súper 8 que atesoramos, de esas botas vaqueras que conseguimos en Pino Suárez por 60 pesos, ¿Qué significa ser pop en ésta época?

He aquí seis recomendaciones que te pueden ayudar a descubrirlo*

[6] Usa modelos clásicos de ropa o accesorios que se produjeron en serie pero que ya están descontinuados (unos Ray-Ban Wayfare ochenteros, la típica chamarra Members Only, etc.). Eso muestra que apoyas la producción en serie, pero que eres “especial”, que no consumes lo que cualquier persona podría comprar en una tienda departamental.

[5] Se caballeroso y educado. Defiende una postura política liberal pero relajada, y de vez en cuando ten alguna opinión políticamente incorrecta, contradictoria y reaccionaria, para causar polémica. Algo como: “Si por mi fuera, Banksy (o Michael Moore, o cualquier “héroe” del reclamo social) estaría tras las rejas. No me malinterpreten, creo que es muy brillante, y le ha dado muchísimo al arte, pero no deja de ser un criminal”. Ten amigos de muchas nacionalidades, y de vez en cuando admite que más que como personas, te interesan como mosaico étnico

[4] Surfea modas “underground” pero pretende ir adelante. Por ejemplo, si el street art se pone de moda, aprende sobre él, cítalo en tu trabajo (o en la decoración de tu casa) y ten siempre en mente un par de nombres que soltar casualmente en una conversación. Pero si algún exponente se vuelve muy famoso, (Banksy, por ejemplo) ten siempre un par de nombres menos mainstream, (Blek Le Rat, Copyright, etc.) y no te canses de decir cuan superiores son al primero. Cuando una moda esté en la cima, pasa a la siguiente, y critica con furia la anterior. Sí. hay que hacer investigación.

[3] Ve en contra de las políticas de salud en boga, pero cuida tu apariencia. Si adelgazas, por ejemplo, di que fue para usar ciertos pantalones de Hedi Slimane, no porque te importara tu salud, o, si dejas de fumar, di que el tabaco te encanta, y que tu relación con él estaba perfecta, excepto por el tono amarillento que podría haber dejado en tus dientes. La misma actitud aplica con extremos como gangrena o sarcoidosis.

[2] Siempre haz notar tu conocimiento, a la par que tu amor por la cultura basura. Películas como Rambo, Transformers, o How To Loose a Guy in Ten Days deben estar en tu mesa de centro, conviviendo inocentemente con libros de Henry Miller, Allen Ginsberg, y Stieg Larsson. Haz comparaciones casuales entre Lipovetsky y George Michael, o entre Žižek y Kim Kardashian.

[1] La mejor manera de probar que perteneces a un movimiento es negándolo, y el pop tiene mucho que ver con la ironía. No vivas en una zona cool. sino en un área aledaña, y aunque pasees mucho por esa zona, critícala todo el tiempo. Siempre búrlate de todo lo pop, o de todo en general; y si alguien en algún momento te relaciona con el pop, ríe mucho demostrando sorpresa, o tómalo como una gran ofensa y dile que el pop está muerto; que tú contribuiste a esa muerte.

[0] Escribe un blog de ensayos pop con una amiga que sea todavía más pop que tu, y cuélgate de su frescura.

JUANFRAN MALDONADO

Thursday 16 June 2011

MANHATTAN

SOMOS SOLO UNOS NIÑOS

Nunca fui a Nueva York, pero te imagino caminando por ahí. Me he hecho cortes de pelo imitándote, así como tu alguna vez te inspiraste en Keith Richards, el día que te cansaste de tu corte folk.

Te conocí, yo ya grande, lamentablemente, fuiste a Buenos Aires y un día después de tu concierto supe quien eras, ojalá hubiera sido antes seguro me hubieras dado una vuelta mas en la cabeza.

Tengo una prima que dice ser tu fan, dice inspirarse mucho en ti y aparte presume haber nacido el mismo día que tu, pero mucho no le creo. ¡Qué tiempos aquellos donde ser artista era otra cosa, ahora todos lo somos o vamos de eso!

De nuevo en Buenos Aires, después de buscarlo en México y no encontrarlo, me topé con tu libro: “Éramos unos niños”. ¡Qué locura!, viajé a Uruguay y una pareja que conocí también estaba picada con él. Regresé a México y el primer amigo con el que me encontré me lo presumió, pero la versión gringa, confieso que me dio rabia cuando la vi, tiene mas fotos y una parte mas.

Leerlo fue maravilloso. ¿Cómo haces para acordarte de todo lo que viviste, de toda tu ropa, tus objetos, los momentos? ¡Si!, seguro todo era mas intenso. Cómo alargué las últimas páginas, sería porque sabía el final y no quería llegar

Eso que vivías con Robert, era amor de verdad, ¿no? ¿Pero tiene que ver con la pasión con la que viviste todo o con el deseo de fama que compartían?

Conforme te iba leyendo pensaba que todo era maravilloso, que me podía identificar con cosas y anhelar el amor como tu lo viviste, pero que nunca he pensado en ser famosa, o que en estos tiempos pensar en fama no es lo mismo que en ese entonces. Qué difícilmente te podrías ganar un título parecido a “la madrina del punk”, ahh bueno tengo una amiga a la que le dicen “Indie Mama”, si lo tengo que comparar con algo. Creo que estamos en una época en que solo los futbolistas entienden de fama. En ese sentido somos solo unos niños, imitando vivir a tu manera, sabiendo que nunca será igual, imaginando a la colonia Roma como nuestro Manhattan.

Por lo pronto yo a veces me paseo con mi camiseta de FUCK THE CLOCK, nostálgica de algo que nunca viví, pero que por algún motivo nos haces sentir como si lo hubiéramos hecho.

Anabella Pareja Robinson

ADOLESCENCIA EN MANHATTAN

Hace unas semanas, Anabella Pareja (mi blogmate, como ya sabrán los que nos leen), me prestó un libro: Éramos Unos Niños, de Patti Smith. Una Historia de su vida con Robert Mappletorp en el NuevaYork de los 60’s 70’s. Aquella fue una época mítica en la que todo pasaba. Todo el mundo moría de hambre (se podía vivir en Manhattan siendo pobre), y todos los grandes actores del arte contemporáneo se conocían completándose mutuamente los centavos para el café, o escabulléndose para no pagar la renta ya atrasada en el legendario Hotel Chelsea. Recitando poesía en algún tugurio nocturno, recolectando basura para un collage, o intentando entrar a la sala VIP del Max’s Kansas City, donde la corte de la Factory se daba cita. Desde William Burroughs hasta Jannis Joplin, todos se cruzaban. Todos sabían que esa era su época. que el tiempo les pertenecía.

En cuanto tuve el libro en mis manos, comencé a leerlo como un obseso, y el primer día me dormí a las 6 de la mañana, sin poder parar. Los siguientes días leí muy brevemente, y ahora hace quizá un par de semanas que no lo abro. Me da tristeza que se acabe. Siento que, al acercarme al final, contribuyo a que esa época increíble se desvanezca, a que Robert muera. Soy un cómplice de su historia, a la vez menos y más involucrado de lo que me gustaría.

Me encanta pensar en la seguridad que siempre tuvieron ambos en su arte, en su manera de vestir, en sus cortes de cabello tan fuera de época; en su irreverencia, e incluso en sus injurias a mas de un incauto. No sólo querían hacer Arte, no solo tenían cosas importantes que decir. Querían ser famosos, rockstars, y lo tenían bien claro. Fueron por ello y lo consiguieron, sin importar cuantas veces fuera necesario pasar por encima de si mismos, o de otros. La antítesis del modelo romántico, para el que esa carrera por la fama significaría un ultraje a su condición de artista como ente sagrado. ¿O, no?

Aún así, nunca dejaron el romanticismo de lado. Una nueva generación, que reinventó la noción sacrificial del artista, y la insertó en el sueño americano. Una nueva manera de ver la espiritualidad, la entrega del artista romántico, que no se lleva mal con los anuncios espectaculares, con las disqueras, o con las cenas de galeristas en el upper east side.

Acaso todos estamos siguiendo los pasos de esa generación? acaso todos queremos ser profundos, pero profundamente cool, a la vez? Que tanto la forma inusual en la que me ato las botas definirá el futuro de mi carrera?

Robert, Patti: denme una señal

Juanfran Maldonado



Wednesday 11 May 2011

5 TOP POP UP VIDEO PLAYLIST 5

top pop up. Hacer un top five de videos es tan difícil…
Un par que justo antes de empezar consideraba inexcluibles (entre ellos Les Artistes de Santogold, I think we are alone de Tiffany, y un raro anuncio de Africola, que aun cuando no cumple las condiciones para ser un vedeoclip, es maravilloso), terminaron cediendo su lugar a otros por mera restricción de espacios. La lista que aquí les ofrezco no es para nada un intento de definir “los mejores 5 videos de la historia del pop”. No tendría ningún caso siquiera intentar semejante imbecilidad. En cambio, he decidido escoger estos que considero muy importantes por razones varias. Algunos muy conocidos, otros apenas han tenido cierto crédito en el hall of fame del vedeoclip; pero todos ellos le han dado un pequeño giro al formato. Un formato por demás apasionante:

[1] Aunque fan de Bowie, sus videos, en términos generales, nunca me han parecido al nivel de su producción musical y escénica. Life on mars (entre otras cuantas, aceptémoslo) es una muy afortunada excepción. La simplísima producción del video, y la franca iluminación, permiten que todo el peso esté puesto sobre David, y que su presencia, su pupila dilatada y su outfit y maquillaje hagan de las suyas. Que mas se necesita para presentar esta canción increíble?





[2] Evidentemente, fue hecho para ser un videoclip, está montado; pero de una manera tan rustica, que tiene casi una textura de documental. La personalidad cínica, irónica, hijadeputa de Mick, en contraste con la casi puberta manera en la que Charlie Watts le teme a la cámara y se apena ante la desfachatez de los otros, es gloriosa. Casi podemos sentir que filmaron esto en la cocina de Keith tras un asado dominguero; Está claro: están performando ante las cámaras, pero aún así se les ve casi au naturel. Una joyaza, y eso sin mencionar el calentamiento y el ritmo de Jagger en los primeros segundos:




[3] Un coro gospel de aliens demoníacos, un equipo de futbol entrenando en las tenebrosas escaleras de una mansión misteriosa, niños lanzando palomas en cámara lenta, ojos brillantes por todos lados, bañistas a cubetazos, una danza tribal con un vestuario digno de una peli del Santo, alusiones a algún grupo nómada tipo Laurence de Arabia, y muchos recursos cada vez mas increíbles. Pero sobre todo, este video tiene las mejores tomas de una mujer escapando por corredores lúgubres con puertas batientes y cortinas de gasa que los 80’s pudieron producir. Ni siquiera las de The Hunger son tan buenas. Y vaya que The Hunger…






[4] Bienvenidos a la post modernidad (y con este término no me refiero a la postmodernidad, sino a lo que siguió a todo eso tan moderno que ocurrió en el díptico 80’s 90’s) Le Tigre, en mi historia personal, inauguró la era de los videos que sustituían las producciones grandes y la publicidad que las grandes disqueras proveían, por una muy buena idea, simple, de pronto incluso filmada en una casa, con una handycam, vestuarios improvisados, y ya está. El video de Deceptacon Nació incluso antes del auge de YouTube. Yo de hecho, introducido a el por mis recién adquiridos primos ingleses, lo vi por primera vez en Google videos (quien se acuerda de ellos ahora?)




[5] Electric Six simplemente es super divertido. Nada más que decir. The video says it all have some fun.




JUANFRAN MALDONADO







Video playlist. Me encanta como suena esta combinación de palabras. Este no es un top five, porque no logré acomodar los videos del primer lugar al quinto lugar, pero esta si es una lista de cinco videos que me fascinan. No sé si las canciones en si, pero definitivamente en combinación con la imagen lograron algo increíble. Es como cuando ves una película de Sofía Coppola, hace que te gusten canciones que por si solas no habían logrado mucho pero cuando las usa para musicalizar una escena, estas canciones se quedan sonando en tu cabeza. Me pasó con Cool de Gwen Stefani en la película Somewhere.

1. Sabotage de Beastie Boys. Quién no ha querido hacer una película de acción y lo ha visto inalcanzable. Ellos lo lograron, haciendo un pequeño resumen hicieron la película de acción mas maravillosa que he visto. Rescatando todos y cada uno de los elementos que una película de acción puede tener.





2. Influencia de Charly García. Calzas Rayadas, instrumentos, amplificadores, whisky, cigarro, rojo y no sé como se llama este recurso de poner sonidos arriba de la música en vivo, que me encanta. Rock puro, ahh y las manos de Charly!





3. Love is Strong de los Rolling Stones. Quién puede resistirse a estos gigantes paseando por la ciudad y mas cuando uno cae en seco al piso.





4. 1979 de Samashing Pumkins. Nací en el 1979. Veo este video y sonrío.







5. Sugar Water de Cibo Matto. No quería ser obvia poniendo un video de Michel Gondry, pero no lo pude evitar y este en especial de pantalla dividida, juego temporal, la construcción, dos caras de lo mismo. Desde que lo vi por primera vez, cada vez que mencionan la palabra videoclip me viene a la mente.
La lista podría seguir, pero nos limitamos a cinco. No puedo parar, vienen y vienen videos a mi cabeza.
Por suerte existe Youtube!

AHHHHH!!! este video no se puede embedear, pero lo pueden ver en:

Saturday 30 April 2011

TAL VEZ LA PRIMERA VEZ ....

MI PRIMER ENSAYO DE SU PRIMERA VEZ

Siempre me ha gustado ver a la gente en el escenario. Esa transformación de alguien, allá arriba, estando casi segura de que quien subió no tiene nada que ver con el que estaba abajo …… Imaginarme esa cosa de doble vida, de como eligen su nombre, su vestuario, la lista de canciones, de cómo se comportan frente a las multitudes y después pensarlos en el comedor de su casa… me fascina!

“Fuera del escenario soy un robot. En el escenario consigo emocionarme. Eso probablemente explica porqué prefiero disfrazarme de Ziggy a ser David.”

David Bowie

Para este ensayo tenía la idea de escribir sobre la primera vez de diferentes músicos en el escenario, pensaba que en Google encontraría todo tipo de información y que tendría un ensayo maravilloso: Mi Primera Vez En El Escenario, por Anabella Pareja. Me senté frente a la compu con un café y muy decidida googlee: la primera vez de Patti Smith en un escenario, la primera vez de Los Ramones en un escenario, la primera vez de Bowie en un escenario, la primera vez de Michael Stipe en un escenario…. Así, varias combinaciones mas y nada. No encontré ninguna información al respecto. La única primera vez que me apareció varias veces sin importar el nombre del músico que estaba buscando fue la primera vez de Mick Jagger actuando en la entrega de los Grammy este año. Frustración! Me entristeció que esa primera vez que tan importante puede ser para nosotros, (en actividades cotidianas y extraordinarias), pareciera que en los músicos pasa desapercibida y que la que importa es la primera vez que alguien importante los vio y les propuso tocar con ellos o ser su manager o algún primer paso que los haya podido acercar a la fama, respecto a esto puedo decir que si hay información y mucha. Es decir la primera vez que haces algo no importa, importa la primera vez que alguien reconocido aprecia ese algo que estás haciendo.

Así que no pude escribir mi ensayo maravilloso, pero me fascinó la idea de que hay muchas primeras veces de lo mismo. Por ejemplo, ante mi frustración de no poder escribir este ensayo como lo había planeado, decidí pensar en opciones de ensayo, no sé, tal vez escribir de la primera vez que fui a un concierto y que entonces era la primera vez de algún músico de tenerme frente a sus ojos. Pero me di cuenta que tenía que mentir respecto a mi primera vez en un concierto, porque mi primer concierto fue el de Juan Luis Guerra y su 4:40 con mis papás en el auditorio, por lo menos el primer concierto que ahora recuerdo y que para un ensayo suave esto no sería muy interesante. Así que me puse a pensar cual podría ser una primera vez de un concierto que pudiera ser increíble y me vinieron a la mente los conciertos de Chemichal Brothers, de Gorillazz, de Massive Attack, de Daft Punk, de Belle and Sebastian y que hasta el día de hoy tenía solo dos que me hubiera gustado que hubieran sido mi primer concierto, el de R.E.M. o el de Coco Rosie, pero fueron hace muy poco, imposible mentir que alguno de estos fuera mi primer concierto. Y tal vez si uno de estos hubiera sido mi primer concierto, este hubiera podido ser un ensayo maravilloso: Mi Primera vez En Un Concierto por Anabella Pareja, pero tampoco fue y me di cuenta que difícilmente las primeras veces son tan maravillosas como el pop nos ha hecho creer y que por eso los músicos prefieren no tener recuerdos de su primera vez en el escenario o por lo menos de no compartirla y que por eso intentar hacer un maravilloso ensayo de primeras veces es casi imposible si no somos lo suficiente naifs para creerlo.

Anabella Pareja Robinson

THE FIRST CUT IS THE DEEPEST

La primera vez que escuché a Phoenix, fue gracias a la pasarela otoño/invierno 04 de Dior Homme. Hedi Slimane era un grande en aquel entonces, el primero en entender la forma de una nueva generación, reinventando la masculinidad (o eso pensaba en ese entonces). La primera vez que usé skinny jeans, fue por Slimane. Y desde su segunda temporada con Dior en 2002, Boys don’t cry, fui fan. Victime Of The Crime (así se llamó la colección del 04), fue una cosa increíble, un look que aún hoy sigue presente.

Yo tenía 19, y para mí Hedi era un gurú. Leía sus entrevistas, copiaba sus looks, y escuchaba su música. Phoenix fue la primera banda que me recomendó (la siguiente fue Blondie), y Victim Of The Crime, la canción con la que Phoenix soundtrakeaba el show. La ame al instante.

La primera vez que escuchamos a una banda es determinante, sobre todo si somos los primeros en nuestro círculo. Queda un cierto orgullo por saberlo antes que nadie. Hay muchas maneras de escuchar a una banda por primera vez: radio (no lo hago mucho), recomendación directa, suerte, robo de discos, blog surf, obligación, fiesta, hurto de Ipod, last fm, etc. Internet killed the mtv star. Así como hay muchas maneras de hacer cualquier cosa por primera vez.

En nuestra cultura se concede muchísima importancia a las inauguraciones: las premieres de películas esperadas se abarrotan no porque la gente ya no pueda esperar un día más, sino porque quieren ser los primeros; el primer beso, la primera cogida, el primer millón, la primera cana (espero que aún falte para eso), la primera borrachera, la primera pelea, la primera dama, el primer ministro, I am texan and I am number one. La cultura pop está llena de clichés románticos que a la memoria vuelven maravillosas esas primeras experiencias originalmente bastante regulares; Macaulay Culkin es la personificación de lo que estoy diciendo; pero además, está infestada de rankings: quien es mejor, quien vendió más, pero sobre todo: quien fue el primero. Y esa medida, la transpolamos fácilmente a nuestras vidas. vidas pop. vidas ranking. vidas vh1. VH1das.

Iggy Pop fue el primero en intentar un suicidio en escena en 1974

The Who, los primeros en destrozar instrumentos en escena alrededor de 1964

El primer desnudo en escena (una chica cuyo nombre desconocemos) ocurrió en 1912 en la Folies-Bergere, París

Jim Morrison fue el primer rockstar en ser arrestado en escena en 1967

Thriller, el primer disco en vender más de 50 millones de copias (110), en 1982

New Kids on the Block, la primera boyband conocida como tal, surgida en 1986

Julia Roberts fue la primera actriz en cobrar 20 millones por una peli (Erin Brocovich) en el 2000

Twiggy, la primera top model de la historia, en los 60’s

David Bowie, el primer rockstar en publicar su bisexualidad

Etcétera. Los primeros lugares en primeritud, a veces buscados, a veces circunstanciales, a veces aseguran un pequeño cachito de eternidad. A veces es la previa fama la que asegura un lugar en algún ranking, cualquiera, no importa, démosle unos cuantos primeros lugares a este tipo, se lo merece, ya es famoso, Let’s Guinnes this folk up…

Juanfran Maldonado


Friday 15 April 2011

HAPPY TIMES. SAD SONGS.

Este No Es Un Ensayo Nostálgico

“Con los discos se tienen noviazgos, durante un tiempo los escuchas intensamente, luego te aburren y los dejas o los cambias por otros y por algún motivo un día vuelven a aparecer.”
Un amigo antes del 2000.

Pasos para comprar un disco en la época en la que Napster no había aparecido. (Con comentarios del escritor)

1. Ahorrar. 2. Tener el tiempo para ir a la disquería. 3. Estar en la disquería, caminar por los pasillos y después de varias horas elegir un disco. Comentarios. Este paso en mi caso era bastante azaroso. O alguna vez había escuchado el nombre en Radioactivo 98.5, o me gustaba la tapa o en alguna fiesta se me había ocurrido preguntar de quien era ese tema y cuando estaba en la disquería por casualidad me acordaba del nombre o lo leía y me acordaba. Mi realidad era que cercanamente no tenía acceso a mucha información musical y no sé porque no sabía como buscar por mi parte. Mis amigas “las fresas” cantaban Alejandro Sanz y “los alternativos” Fernando Delgadillo. Mi primo vivía con nosotros pero en esa época escuchaba Pantera o Metallica que por algún motivo tampoco me satisfacían mucho. 4. Pagar el disco. 5. Correr a tu casa a escucharlo toda la tarde y no querer tener otro plan en ese día, realmente después de esta actividad quedabas satisfecho. Comentarios. En este último paso he tenido momentos de insatisfacción, de frustración y de llanto. Te equivocaste y no era el disco que pensabas. Me pasó que yo recuerde con The Lemonheads confundida con Blind Melon, algo en común tiene el nombre, y los pelos de los integrantes de los grupos, aunque bueno en el accidente descubrí el hit Into your arms. También me pasó con un disco de Fiona Apple, pensaba que todos eran tan buenos como la versión de Across The Universe y por lo menos ese que compré no lo fue. Pero la peor de las frustraciones fue el día que compré tres discos, estaban muy baratos, The Smiths, era uno de los tres, de los demás no me acuerdo, los bloquee. Mientras iba camino a casa me hablaron unos amigos para ir a un bar árabe a fumar en narguile y tomar té. Me desvié y fue un grave error. En el bar obviamente me pidieron que les mostrará los discos que había comprado, nos quedamos un rato en el lugar y nos despedimos. Llegué a casa con muchas ganas de escuchar los discos, los cuales lamentablemente no estaban en mi bolsa, después de mostrárselos a mis amigos me olvidé de guardarlos, quedaron en el bar y alguien mas se los llevó.
En este último paso he tenido momentos de gran satisfacción. Uno de los que recuerdo es cuando entré a una disquería y vi un disco rojo con una foto de fondo de una chica. El nombre de la banda, Belle and Sebastian y del disco, If you’re feeling sinister, lo compré. Regresé a casa, puse el disco, me acosté, siempre me gustó la música para mirar el techo y este fue perfecto, del estilo happy/depresivo que tanto disfruto.
Confieso que el último cd que compré casi de la misma manera y con la misma satisfacción que el de Belle and Sebastian fue I Am Bird Now de Antony and the Johnsons. Después me compré una compu, me instalé el limewire y todo lo que le siguió. Me parece maravilloso, pero hace que no me logre aprender los nombres de las bandas ni de los temas y que por mas que me gusten mucho no recuerde que tapa pertenece a que disco. Se me complica escuchar un disco completo y no logro tener bandas favoritas nuevas. No sé si los noviazgos musicales se sigan dando, por lo menos en mi caso he preferido volver a viejos amores y quedarme con ellos.

Anabella Pareja Robinson





Este Es Un Ensayo Nostálgico.

“Rick: You know what I want to hear.

Sam: No, I don't.

Rick: You played it for her, you can play it for me!

Sam: Well, I don't think I can remember...

Rick: If she can stand it, I can! Play it!
Rick: PLAY IT AGAIN, SAM!”
Casablanca

La vida tiene un soundtrack.
Quizá sea inconsciente, pero el olor a hueledenoche, o a tubos de óleo a medio secar, o a, no se, madame rochas, remite, sí o sí, a una etapa específica de la vida. A una persona, a un momento. Ciertas canciones (y a veces álbumes enteros), se encuentran enredadas con recuerdos de una forma no menos irremediable, aunque tal vez mas consciente. El soundtrack de la vida no es necesariamente una decisión personal; abunda en gustos culpables. Por ejemplo, aunque se odie la trova, es imposible dejar de sonreír cada vez que suena cierta canción de Fernando Delgadillo, que recuerda a una chica de la adolescencia. Imposible.
Regresar azarosamente a momentos importantes gracias al shuffle de la cotidianidad ocurre todo el tiempo. Configura el humor, pero no solo eso:
Es inevitable asignarle temas a la gente, particularmente si se está enamorado. No se trata tanto de dedicarle una canción a alguien, ni de escoger “nuestra canción” como en chick-flicks ochenteros. Es una cosa que se da: Antes de poder notarlo,,, FUM!!!! Digital Love de Daft Punk, ya le pertenece a alguien a principios del dos mil; o Heroes de Bowie, significa esa tarde de ruptura cerca de la plaza Rio de Janeiro. La lista (como las anécdotas) es larga y siempre habla por si sola: She’s a Raibow de los Rolling Stones, Un beso de Desayuno de Calle 13, Flores Vitamina y Mucho Sexo de la Mala Rodriguez, Where Do You Go To My Lovely de Peter Starstedt, Suspicious Minds de Elvis, Stormy Weather de Billy Holliday, Back to Black, de Amy Winehouse, hasta (por que no decirlo) November Rain de Guns And Roses. De pronto cursi, evidente; de pronto absurda, como en el caso de Donde Te Agarró El Temblor de Chicoché y la Crisis o I Want It That Way de los Backstreet Boys. De pronto, también inesperada: Fuck Nicole de los Teenagers, Ms Jackson, de Outcast. A veces es meramente trendy, como Kids, de MGMT. Repito: no toda la lista es placentera, mas de un ejemplo avergüenza: Intocable, el ya mencionado Delgadillo o algún track de los Red Hot Chilli Peppers.
El punto es que, se quiera o no (como dicen los Rolling Stones en su canción Bitch), al escuchar ciertos acordes, salivar como el perro de Pavlov es inevitable: Nostalgia. Melancolía. Ceder ante el recuerdo en cuestión y observarlo. Disfrutarlo o sufrirlo.
Así como hay canciones que alegran por mera circunstancia, hay otras (que en algún momento fueron favoritas), que provocan pánico, o, en el mejor de los casos, repulsión. Para evitar amarguras innecesarias, y puesto que (y cito a la chica de Social Network): “Internet is written on ink”, me ahorraré los títulos…

Juanfran Maldonado